La fuente
Buscando un dibujo que no he encontrado, me he encontrado con esta historia de cómo poco a poco, la Humanidad pudo volar. Reconozco que lo que más me ha gustado son los dibujos. Enlace original.
La historia
Texto: Francisco Fernández
Ilustración: Myriam Holgado
Desde tiempos muy lejanos, los hombres quisieron viajar por el aire.
Como vuelan los pájaros con sus alas.
O igual que las nubes, que flotan en el cielo.
Hubo un artista, cuyo nombre era Leonardo da Vinci, quien además de pintor era inventor.
Él ideó y dibujó muchas aeronaves, algunas de las cuales tenían forma de pájaro.
Pero nunca se decidió a construirlas, y menos a volar en una de ellas, pues otros que lo intentaron habían fracasado. |
Pasó el tiempo, y otros hombres pensaron que sería mejor viajar en globos; y así comenzaron a diseñar y construir enormes esferas que llenaban con aire caliente o con gas, que son más livianos que el aire.
De esta manera el globo se elevaba y era empujado por la brisa, de una a otra parte.
Los hombres se introducían en una canasta que el globo tenía en su parte inferior, y así podían viajar por el cielo y mirar desde arriba a las otras personas que se quedaban en tierra.
También desde lo alto podían verse las casas y los árboles, y hasta las torres de las iglesias y los tejados de los edificios.
Y como los globos se confeccionaban con telas de colores muy llamativos, desde abajo era fácil distinguirlos. | |
El primer hombre que tuvo el valor de viajar en uno de esos aparatos fue un boticario francés. Su nombre es un poco largo y difícil.
Y aquí, en México, ¿sabes quiénes fueron los precursores?
Nuestros historiadores dicen que el primer vuelo en globo realizado por un mexicano ocurrió en 1842.
El aeronauta se llamaba Benito León Acosta, y cobraba un peso a cada uno de los espectadores que iban a verlo volar.
El principal problema de los globos era que no podían manejarse con facilidad y muchas veces, en vez de trasladarse en la dirección que los hombres deseaban, el aparato iba hacia donde el viento lo empujaba.
Entonces, como los hombres no estaban dispuestos a dejarse gobernar por los caprichos del viento, inventaron otra clase de aeronave. Era como un globo gigante, pero alargado.
A ese aparato se le colocó un motor y un timón para dirigirlo en el rumbo deseado, a pesar de la dirección del viento. Por eso se le llamó dirigible. |
Pero los hombres seguían con sus ideas de poder volar como las aves.
Y pensaban: Los pájaros son más pesados que el aire, sin embargo, se pueden remontar por el cielo a grandes alturas y desplazarse a gran velocidad. ¿Por qué no los hombres? |
El primero en volar en un aparato más pesado que el aire, pero con alas, igual que los pájaros, fue el alemán Otho Lilienthal. | | Él fabricó una extraña nave que se elevaba impulsada por la fuerza del viento y se sostenía en el espacio durante un tiempo muy breve: se le llamó planeador. |
| Después vinieron muchos más. | |
| Algunos tuvieron éxito en sus pruebas.
Otros fracasaron.
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Hasta que, por fin, hicieron su aparición los hermanos Wright, norteamericanos. Ellos decidieron colocar al planeador un motor que lo impulsara con más fuerza.
Y así lograron recorrer con ese aparato una distancia de 250 metros en un minuto.
A partir de ese momento, los hombres comprendieron que ya podían viajar por el aire como las aves. Y llamaron aviones a esos aparatos.
Pronto, en todos los países comenzaron a construirse aviones, con los cuales empezaron a realizar viajes.
Cada vez más difíciles,
cada vez más largos,
cada vez más rápido.
El entusiasmo por la aviación llegó también a México, y en 1910 surgieron en nuestro país los primeros pilotos. | |
Antonio Lebrija voló sobre la Ciudad de México por primera vez. Se elevó a 20 metros de altura, y recorrió por el aire una distancia de medio kilómetro. Y casi se mata, pues al avión que tripulaba se le paró el motor en pleno vuelo.
Finalmente pudo aterrizar y, a pesar de que se lastimó un poco y se asustó mucho, siguió efectuando vuelos durante muchos años.
Otro de los pioneros de la aviación fue el ingeniero Guillermo Villasana. Él construyó el primer avión de fabricación mexicana, al cual le puso el nombre de Latinoamericano.
Y otro señor a quien le gustaba muchísimo la aviación fue el presidente Francisco I. Madero.
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Tanto interés y tanta fe tenía en los aviones, que en 1911 aceptó volar sobre la Ciudad de México. De esta manera, Madero fue el primer estadista en el mundo que viajó en avión.
| | México fue también el primer país del mundo que utilizó el avión para transportar correspondencia. Este viaje se hizo en 1917, entre Pachuca y la Ciudad de México. |
En la actualidad nos hemos acostumbrado tanto a los aviones, que nos parece muy natural que vuelen.
Pero ¿cómo funcionan? Para empezar, tienen motor, como los automóviles.
Estos motores impulsan al avión hacia adelante, haciéndolo correr por la pista cada vez más rápido.
Cuando el avión llega a su velocidad máxima por tierra... Entonces empieza a elevarse en el aire.
Pero ¿cómo consigue elevarse, si es más pesado que el aire?
Lo logra gracias a que tiene alas, como los pájaros.
Debido a la forma de sus alas, el viento corre más rápidamente por encima que por abajo. Esto produce una presión muy fuerte debajo de las alas, que las empuja hacia arriba, cada vez con más fuerza.
Mira cómo el avión sigue corriendo por la pista. Mientras más rápido anda, mayor es la velocidad del viento y mayor también la presión que actúa debajo de las alas.
Y cuando esa presión se vuelve más grande que el peso de todo el avión, éste empieza a elevarse.
Pero todo esto no sería suficiente para hacer volar un avión, si no fuera por el piloto, que es el hombre encargado de controlar todos los aparatos que están en la cabina de mando del avión para que éste pueda desplazarse por la pista y tomar velocidad, elevarse después poco a poco, trasladarse por el cielo de una ciudad a otra, y descender finalmente en el lugar debido.
No debemos olvidar al copiloto, que es el hombre más importante después del piloto. Y qué decir del mecánico, que vigila el funcionamiento de todo el avión. Y también está el operador de radio, encargado de comunicar a los tripulantes del avión con otras naves o con el aeropuerto. Gracias a este señor y al radar, se puede evitar que las aeronaves choquen en el aire, o que intenten aterrizar al mismo tiempo, o se pierdan por ahí.
Y, por último, está toda esa gente que uno casi no se da cuenta de que está, pero que trabaja para que todo salga bien.
Los planeadores se utilizan para practicar la aviación. Existen distintos tipos de aviones, fabricados de acuerdo con la utilidad que se les dará.
Hay aviones como éste, que aterrizan en la nieve.
Los hay también para transporte comercial. Cuentan con grandes bodegas, en las que se almacenan pesadas cargas a fin de trasladarse de una ciudad a otra, o de un país a otro.
Se usan también como auxiliares de la agricultura; con ellos se pueden rociar insecticidas en grandes extensiones de terreno en menos tiempo.
Y también se utilizan en las guerras para trasladar tropas militares y arrojar bombas.
Pero mejor refirámonos a los aviones de pasajeros, que después de todo son los que cualquier persona puede utilizar.
Como el "Jumbo", uno de los aviones más grandes de nuestra época, capaz de transportar casi 400 pasajeros en un solo viaje. | |
O como el "Tupolev", que puede llevar 120 pasajeros a una velocidad de 2 500 kilómetros por hora. |
Y quién no ha oído hablar del avión supersónico "Concorde", que alcanza una velocidad de 2 200 | | kilómetros por hora, se eleva a 20 000 metros de altura y puede llevar 100 personas a bordo. |
Y ahora, cuando llegamos al final de esta historia, es bueno recordar el comienzo: desde tiempos muy lejanos, los hombres quisieron viajar por los aires. Como vuelan los pájaros con sus alas.
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O igual que las nubes, que flotan en el cielo. |
Y pudieron hacer su deseo realidad.
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